El turismo rural en Patones de Arriba

Ya hemos hecho alguna reseña en nuestro blog, sobre qué lugares cercanos a Madrid podéis utilizar para escapadas rurales, como es el caso de Cercedilla. En esta nueva ocasión vamos a profundizar en Patones de Arriba, situado al nordeste de la Comunidad de Madrid.

¡Empezamos!

Municipio de Patones

Patones es un municipio perteneciente a la Comunidad de Madrid y situado al nordeste de la misma. Su población se reparte entre las localidades de Patones de  Arriba (que por su patrimonio es uno de los centros de turismo rural regional) y Patones de Abajo. El municipio de Patones, en la cuenca del Jarama, está en el norte oriental de la Comunidad Autónoma, cerca de la provincia de Guadalajara, a unos 60 kilómetros de la capital. Se encuentra en la zona de turismo de Madrid de la Sierra Norte. Declarado conjunto histórico en 1999, el pueblo se halla a 832 metros sobre el nivel del mar. El municipio tiene una superficie de 34,50 kilómetros cuadrados.

¿Cómo llegar a Patones?

  • En coche privado. En coche puedes llegar por la A-I, Autovía del Norte, (Madrid-Burgos) tomando la salida del kilómetro 50 en dirección a Torrelaguna por la Nacional 320. Una vez cruzada esta localidad sigue hasta Patones de Abajo por la M-102.
  • En transporte público. La compañía ALSA cuenta con dos líneas con salidas diarias para llegar a Patones, que parten desde el intercambiador de Plaza de Castilla. La línea 197 va desde Madrid hasta Torrelaguna, cuenta con servicios que continúan hasta Patones, y otros acaban en Torrelaguna en este caso tendrás que cambiar de autobús en la última parada y coger un minibús (Línea 913) que te llevará hasta Patones. La línea 197A va desde Madrid hasta Uceda y te deja directamente en Patones.

Origen de Patones de Arriba

Edad Antigua

La historia de Patones comienza tiempo atrás, hace treinta mil años, cuando hombres y mujeres de la Edad de Piedra comenzaron a utilizar la Cueva del Reguerillo como hogar y refugio. Los grabados que dibujaron quedaron en la cueva como testimonio de su presencia y forma de vida y fueron descubiertos milenios después. La cueva se siguió utilizando en el III milenio a.C. durante el Neolítico y la Edad de Bronce por pastores que también utilizaban la parte exterior del cerro de la Oliva.

Edad Media

Tras la reconquista cristiana volvió a ocuparse el cerro de la Oliva, esta vez en la parte inferior, por un conjunto de familias que debió formar un pequeño núcleo de población rural alrededor de la ermita de la Virgen de la Oliva (siglo XIII).

Edad Moderna

No es hasta el siglo XVI cuando pastores de Uceda formaron la pequeña alquería de los Patones, que recibió este nombre por el apellido Patón de sus fundadores. Los inconvenientes que suponía a los vecinos ser un olvidado barrio de Uceda los llevó a nombrar a un Rey propio, el Rey de Patones, una especie de alcalde o juez de paz que administraba justicia entre los vecinos.

Durante el reinado de Carlos III se escribió un memorial donde se exponía la situación de olvido por parte de la Villa de Uceda. El 3 de agosto de 1769 se le concede el título de lugar o aldea independiente de la Villa de Uceda, momento en el que posiblemente desapareció la figura del Rey de Patones. En el siglo XX de forma paulatina los habitantes de Patones descendieron de Patones de Arriba al llano donde se creó un nuevo núcleo urbano, hoy Patones de Abajo, asentamiento donde habitamos la mayoría de los vecinos. En los años noventa Patones de Arriba se declaró Bien de Interés Cultural y continuó su desarrollo turístico hasta la actualidad. Hoy residen en este pequeño núcleo urbano de forma permanente unos veinte vecinos.

Entorno ambiental de Patones de Arriba

Geología

La geología es la “Memoria de la Tierra”. El registro geológico posee una valiosa información del pasado. También es de gran ayuda para comprender procesos geológicos actuales, su arquitectura, algunos topónimos, incluso juegos tradicionales. Patones concentra 10 de los 36 Puntos de Interés Didáctico (PID) identificados en el Norte de Madrid. Son lugares singulares por sus recursos naturales y humanizados que facilitan el conocimiento científico y cultural. La presa del Atazar, el meandro abandonado del río Lozoya, el pontón de la oliva o la cueva del Reguerillo son algunos de los lugares con patrimonio geológico.

Clima

El clima en Patones es continental, esto es, los veranos son cortos, muy calientes, secos y mayormente despejados y los inviernos son largos, muy fríos y parcialmente nublados. Durante el transcurso del año, la temperatura en Patones generalmente varía de 0 grados centígrados a 31 grados centígrados y rara vez baja a menos de -4 grados centígrados o sube a más de 35 grados centígrados.

La temporada calurosa dura 2,8 meses, del 17 de junio al 10 de septiembre, y la temperatura máxima promedio diaria es más de 27 grados centígrados. El día más caluroso del año es el 30 de julio, con una temperatura máxima promedio de 31 grados centígrados y una temperatura mínima promedio de 16 grados centígrados. La temporada fresca dura 3,7 meses, del 15 de noviembre al 5 de marzo, y la temperatura máxima promedio diaria es menos de 13 grados centígrados. El día más frío del año es el 19 de enero, con una temperatura mínima promedio de 0 grados centígrados y máxima promedio de 9 grados centígrados.

Vegetación

Su naturaleza se encuentra entre el Sistema Central y la Cuenca del Tajo. Por eso es una zona de transición desde el punto de vista geológico, topográfico y paisajístico.

Este factor que ha favorecido la configuración de un medio natural con elementos de gran valor ambiental que incluyen recursos hidrológicos, diversidad de ecosistemas y especies de flora y fauna de interés comunitario.

La diversidad geológica de Patones contribuye a una interesante diversidad de flora. Tenemos jaras pringosas en las zonas pizarrosas, retamas y aulagas en las calerizas, campos de cultivo en las terrazas de los ríos y bosques de ribera junto a los cauces. También contamos con un pequeño bosque de encinas, quejigos y arces en la umbría de la Dehesa de la Oliva y pinares de repoblación.

En Patones buena parte de nuestro término municipal está ocupado por matorrales. Se distribuyen tanto por las zonas de suelos calizos como por las de pizarras. En las zonas calizas predominan los romerales y retamares que los puedes observar desde Patones de Abajo.

En las pizarras destacan los jarales de los alrededores de Patones de Arriba. En los roquedos de roca caliza crecen especies singulares, como los zapatitos de la virgen (Sarcocapnos enneaphylla), que ha llevado a considerar el Pontón de la Oliva como un punto de interés botánico a nivel autonómico. Sobre suelos que tradicionalmente estuvieron ocupados por las jaras se reforestaron, a mediados del siglo pasado, bosques de pino silvestre, pino laricio y pino rodeno. Los puedes observar ascendiendo al Cancho de la Cabeza o recorriendo la carretera del Atazar en dirección a El Berrueco. Junto al río Jarama y el Lozoya tenemos sotos y riberas.

Relieve y fauna

Sobre las formaciones geológicas, adaptado al clima y sorteando la acción humana, el paisaje constituye un elemento singular del territorio. Y aunque muchas veces nos pasen desapercibidos estos paisajes son el hogar permanente o temporal de numerosos animales. Algunos prefieren el cobijo de los bosques de galería y el frescor del agua. Otros aprovechan las cavidades y los farallones para vigilar el territorio. Algunos recorren de noche los montes de matorrales.

En Patones especial protagonismo tiene el agua. El paso del río Jarama, el río Lozoya, el embalse del Atazar y los numerosos arroyos, surcan su territorio dando vida a bosques de galería. Éstos dan cobijo a aves como el martín pescador o el mirlo acuático, anfibios como las ranitas de San Antonio o mamíferos como las nutrias. Las aguas frías, cristalinas y oxigenadas son el hogar perfecto para truchas y barbos. En la vega del Jarama el suelo es fértil y permite gran variedad de cultivos. Entre ellos se adivina la presencia del grillo, la cigarra, langosta, perdiz roja y otras aves como el jilguero o la abubilla.

Otro paisaje diferente es el que se forma en la sierra, donde a medida que se asciende por las cuestas de roca caliza da paso a los montes de pizarra. Esta zona arbustiva forma un monte bajo, que configura el hábitat adecuado para zorros, jabalís, corzos y conejos. En las zonas altas, en los cortados que forma el río a su paso por las calizas y las pizarras, vive el águila perdicera, el buitre leonado y el halcón peregrino.

Hidrografía

Dos ríos muy importantes de la región de Madrid, el río Lozoya y el Jarama, se unen dentro de los límites nuestro término municipal. Ambos forman bosques en los que habitan plantas y animales de interés comunitario.

La calidad de las aguas de estos ríos ha influido en el uso humano que desde hace siglo y medio se ha hecho de este territorio: reservorio de agua para el abastecimiento a la ciudad de Madrid.

El río Lozoya forma meandros serpenteantes. Está rodeado de fresnos, alisos y sauces que dan cobijo a numerosas aves como el martín pescador (Alcedo atthis), el mirlo acuático (Cinclus cinclus) o lavandera blanca (Motacilla alba). El Lozoya recorre los montes de pizarra, atraviesa los farallones de Caleza en el Pontón de la Oliva antes de mezclarse con las aguas del río Jarama. El lugar es conocido por los vecinos como “Junta de los dos ríos”. El excelente grado de conservación del río Lozoya a su paso por Patones ha supuesto su integración en la Zona de Especial Conservación “Cuenca del río Lozoya y Sierra Norte” de la Red Natura 2000.

El cauce del río Jarama forma un denso bosque muy umbrío. Es fresco en verano y está salpicado por pozas de aguas frías, cristalinas y tranquilas. Las ramas de los alisos, los chopos y los sauces forman una galería que sirve de hogar para las nutrias (Lutra lutra) y ranitas de San Antonio (Hila arborea). Este río a su paso por Patones también tiene un alto grado de protección ambiental por encontrarse en la Zona de Especial Conservación “Ríos Jarama y Henares”.

Turismo en Patones de Arriba

A continuación, te mostramos los monumentos y lugares más destacados y recomendados cerca de Patones. Descubre qué hacer en Patones y los mejores lugares de interés que puedes visitar en Patones.

¿Qué ver en Patones?

Patones de Arriba, es uno de los mejores y más representativos ejemplos de la arquitectura de pizarra negra, siendo un ejemplo único en la Comunidad de Madrid, lo cual le ha hecho merecedor de ser declarado en el año 1999 Bien de Interés Cultural en la Categoría de Conjunto Histórico. La calidad de conservación de su patrimonio arquitectónico y su enclave en un paisaje singular, hace de Patones de Arriba un lugar privilegiado para conocer e interpretar la evolución de las sociedades humanas desde las más ancestrales formas de vida. La traza y tipología de Patones de Arriba, se remonta a la época prerromana como confirman los restos hallados en el yacimiento de la Dehesa de la Oliva y en otros restos de poblamientos del Sistema Central. En la parte baja del núcleo se ubican las casas que cuelgan mágicamente sobre empinadas calles de pizarra, y en la parte alta encontrarás los restos más antiguos: tinados y arrenes muestra de la importancia que tuvo la ganadería en la economía patonera.

Te recomendamos no perderte:

  • La antigua iglesia de San José. Era en 1653 una ermita con campanario hecha con piedra y cal. Un siglo después se convertiría en Iglesia (1753). Tenía varios retablos y había imágenes de San José, Virgen del Carmen, Virgen de las Candelas Patrona de Patones. Algunas de las imágenes desaparecieron con la guerra civil. Quedó entonces abandonado hasta que se acomete su restauración, abriendo sus puertas al público en 1998 como CITECO. (Centro de Iniciativas Turísticas, educativas, culturales y de Ocio.) y conservando una pequeña capilla con una imagen de la Virgen de las Candelas. En la actualidad, la antigua iglesia de San José es la Oficina de turismo del Ayuntamiento de Patones.
  • Viviendas. Forman un precioso entramado de callejuelas. Realizadas en mampostería de pizarra al exterior y en el interior se les daba llana con barro como material aislante, y se les recubría con un mortero de cal y arena para evitar humedades. Contaban con tres plantas: 1ª planta donde estaba la cocina con el peculiar horno, 2ª planta destinada a los dormitorios y 3ª planta es la cámara o sobrado donde se guardaba el grano.
  • Tinados y Arrenes. Los tinados estaban destinados para cobijar al ganado ovino y caprino. Están formados por un corral con una puerta de acceso donde se seleccionaba los animales para su ordeño. Después se pasaba a una segunda zona que estaba cubierta y que tenía un pequeño zarzo para evitar que se escaparan. Dentro de la parte cubierta estaban los pesebres donde se echaba la comida de los animales.

Los arrenes son construcciones rectangulares realizadas a base de pizarra y sin cubierta ni divisiones internas. La característica peculiar de los arrenes es la ausencia de puerta, teniéndose que una parte de la pared para acceder al interior.

  • Lavadero y Fuente nueva. Lugar de encuentro de las mujeres, frente a la taberna que era el lugar de encuentro típicamente masculino. La conocida como Fuente Nueva (1908) tiene un agua que mantiene excelentes condiciones de potabilidad llegando canalizada desde las pizarras. El Lavadero tradicional perfectamente conservado con dos partes bien diferenciadas, una para aclarar y otra para lavar, aprovecha el agua sobrante de la fuente.
  • Eras. Están documentadas en el S. XVIII. Están empedradas de pizarra o caliza, se disponen en bancales, estos muros de contención se realizaron con el fin de lograr una superficie horizontal en una zona de ladera. En ellas podemos encontrar varios huecos de distinto tamaño y profundidad que tenían como finalidad albergar los aperos de la trilla y servir como fresqueras para mantener el agua en época estival.
  • Yacimiento de la Dehesa de la Oliva. Los testimonios arqueológicos del cerro de la Dehesa de la Oliva dan cuenta de la ocupación de diferentes grupos humanos de culturas y sociedades dispares, por un lado, las manifestaciones artísticas de los cazadores del Paleolítico Superior; por otro lado, materiales dejados por los agricultores del Neolítico o los primeros forjadores, calcolíticos y de la Edad del Bronce.
  • La ermita Virgen de la Oliva. Se encuentra en el paraje conocido como dehesa de la Oliva, es de estilo románico-mudéjar, también conocido como mudéjar castellano-leonés o románico de ladrillo, aunque con rasgos característicos de la arquitectura rural de la zona.
  • Cueva del Reguerillo. Patones cuenta con numerosas cavidades y abrigos en la roca. Algunas cuevas utilizadas desde la prehistoria por nuestros primeros habitantes. La cavidad más conocida es la cueva del Reguerillo, declarada Monumento Histórico Artístico por Decreto de 2 de marzo de 1944. Con casi nueve kilómetros de galerías, tres pisos, grabados rupestres, restos cerámicos, yacimientos paleontológicos, posee un valor patrimonial incalculable. Presenta una gran relevancia arqueológica ya que constituye una importante fuente de información sobre el Paleolítico Superior en el centro peninsular. Quienes utilizaron la cueva como hogar y refugio durante este periodo grabaron en los muros interiores escenas de sus jornadas de caza y pesca. Contiene uno de los yacimientos paleontológicos más importantes de la Comunidad de Madrid, fundamentalmente por la aparición de restos de oso de las cavernas, siendo decisiva su aportación para explicar su distribución en Europa. Actualmente esta cueva está cerrada para todo tipo de visitantesdebido al uso inadecuado que se dio a la misma durante décadas.
  • El embalse de El Atazar. Posee un impresionante paisaje y espectacular ingeniería. Es además considerado un punto de interés didáctico para el estudio de la geología. Como consecuencia de estas características geológicas, durante la construcción de la presa, se presentaron complicaciones.

La ladera derecha de la presa fue necesario reforzarla con nueve vigas de hormigón armado. La izquierda, donde había una falla prácticamente vertical y paralela al cauce, se resolvió con la construcción de cuatro galerías excavadas según la dirección del río y con vigas de hormigón armado.

  • El pontón de la Oliva. Este punto donde el río Lozoya corta las calizas parecía un sitio idóneo para hacer una presa. Así bajo el reinado de Isabel II, entre 1851 y 1858, se construyó la presa más antigua de Madridel Pontón de la Oliva. Obra infructuosa porque al realizarse sobre un sistema kárstico con conductos y cuevas generaba continuas filtraciones.
  • Barranco de patones. Esta típica torrentera en las cuestas, conocidas como Calerizas, descubre variedad de materiales y procesos asociados al agua. Descendiendo desde Patones de Arriba descubrimos el desgaste de las pizarras en la cuenca de recepción, el transporte por el canal de desagüe en el propio barranco y la sedimentación que forma el cono aluvial al llegar a la vega. En la parte alta aparecen los materiales más antiguos, las negras pizarras de las viviendas de Patones de Arriba. A la salida del barranco en Patones de Abajo se depositan principalmente fragmentos de pizarras formando el cono aluvial sobre el que se asientan olivares y viñedos

Desde el siglo XVIII Patones ha sido un reservorio de agua y nuestro paisaje se ha visto transformado. El patrimonio hidráulico está formado por las presas, los acueductos, canales y sifones de distintas infraestructuras hidráulicas. La primera, el canal de Cabarrús, era un sistema de riego que abastecía las huertas de Patones, Uceda, Torremocha y Torrelaguna. En el siglo XIX, reinando Isabel II, se construyó la presa del Pontón de la Oliva y el canal que transporta el agua hasta la actual calle Bravo Murillo en Madrid. La última, la presa del Atazar, una obra faraónica que transformó la forma de vida de los vecinos de Patones.

¿Dónde comer en Patones?

Patones destaca por su excelente gastronomía, referente de la buena cocina de la Comunidad de Madrid, donde la carne, las hortalizas, las legumbres, la miel y los productos de temporada son la base. Su cocina está basada en los productos de la tierra, y en la tradición local, donde se fusiona el saber de la cocina tradicional, con los nuevos gustos culinarios.

Te recomendamos algunos sitios como: El Rey de PatonesTaberna La Bruja, Taberna Real o Restaurante Asador Casa Paco.

¿Qué hacer en Patones?

Te sugerimos actividades que puedes realizar en el pueblo y su entorno. Las hemos dividido en categorías: visitas guiadas, actividades para realizar familias con niños, actividades según la estación y rutas.

En visitas guiadas destacamos el Museo de aula geológico, que esconde un interesante patrimonio geológico y una gran geodiversidad, cuenta con una exposición exterior con una colección de rocas de la Sierra de Madrid y una exposición interior con paneles, maquetas y reproducciones de la cueva del Reguerillo, de un cráneo de oso de las cavernas, fósiles, fallas.

Si te preguntas ¿qué visitar en Patones con niños?, te diremos La senda ecológica del barranco es un recorrido de menos de un kilómetro que une Patones de Abajo con Patones de Arriba. Subir andando por la senda ecológica es la mejor forma de dar un paseo por el entorno con los más pequeños. Además, junto al aparcamiento disuasorio de Patones de Abajo hay un parque infantil dotado de mesas, fuente y juegos.

Para deportistas en Patones. Si eres deportista dispones en nuestro entorno de lugares privilegiados donde practicar tu actividad favorita: escalada, cicloturismo, espeleología, senderismo… Por algo Patones es un conocido destino de turismo activo en la Comunidad de Madrid.

Patones es un paraíso para realizar todo tipo de rutas. Ya sea a pie, en bicicleta, a caballo, para mayores y con pequeños. Si vienes descubrirás un entorno natural impresionante a tan solo un paso de Madrid.

  • Senda del Genaro. Comprende dos etapas: comprendida entre El Berrueco Patones de Arriba y entre Patones de Arriba y El Atazar.

Se inicia en el aparcamiento de Patones de Abajo. Se asciende por la senda del barranco hasta la carretera de acceso a Patones de Arriba. Tras atravesar las instalaciones del Canal de Isabel II, cogemos la pista que sale a la derecha. Seguiremos las marcas del GR 10 que nos acompañara todo el recorrido.

  • Subida al Cancho de la cabeza. Esta ruta circular asciende al punto más alto de Patones, la cumbre cancho de la Cabeza (1263 m). Desde ahí se obtiene una vista panorámica espectacular de la Sierra Norte, del embalse del Atazar, y del término municipal de Patones.

Alojamientos

Si quieres dormir en casas con historia, lugares con encanto, espacios acogedores, descubrir el silencio y la tranquilidad. Patones es el sitio perfecto con sus casas y hoteles rurales.

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